Una producción dirigida por Steven Meisel reúne a cincuenta rostros inolvidables que han transformado la pasarela, el lente y el imaginario colectivo.
Cincuenta rostros, cincuenta épocas, cincuenta formas de entender la belleza. Zara ha decidido mirar hacia atrás con decisión y estilo, presentando una campaña que en lugar de conmemorar, reescribe parte de la historia de la moda con una narrativa contemporánea.
Bajo la dirección de Steven Meisel, la marca española lanza una película en blanco y negro donde figuras como Naomi Campbell, Christy Turlington, Linda Evangelista, Gigi Hadid, Irina Shayk, Kaia Gerber y Cindy Crawford se funden con nuevos nombres como Paloma Elsesser o Vittoria Ceretti. Todas interpretan el clásico de Donna Summer, “I Feel Love”, sin nostalgia, sino con la fuerza de quienes han sabido reinventarse una y otra vez.
La colección cápsula que acompaña la pieza visual está basada en el esmoquin, reinterpretado por Karl Templer con un enfoque monocromático, estructurado y elegante. El maquillaje corre por cuenta de Pat McGrath, el estilismo capilar por Guido Palau y la dirección artística por Jason Duzansky. Juntos, construyen una atmósfera que transita entre lo onírico y lo rotundo.
Además de la campaña, Zara ha reabierto su primera tienda en A Coruña —inaugurada originalmente en 1975— transformándola en una instalación inmersiva con piezas de archivo, ediciones limitadas y publicaciones que han marcado cada década. Es un espacio donde el pasado se encuentra con el presente sin recurrir al artificio, sino con una mirada honesta sobre la evolución del vestir.
Más que una celebración, este proyecto es una declaración: el estilo no envejece, se transforma. Y la moda, cuando es capaz de mirar hacia adentro, encuentra nuevas formas de permanecer.
Otros Artículos
